El 12 de abril, el Consejo de la Unión Europea dio luz verde al Acuerdo de Asociación entre Centro América y la Unión Europea, lo cual lo convierte en instrumento de derechos internacional que deberá ser implementado por todos los países involucrados. Hay varios acuerdos sectoriales entre la UE y los países en la región, pero este es el primer acuerdo birregional de asociación. Como tal, integra los elementos de diálogo político, cooperación y comercio. Este abre oportunidades para tender puentes y fortalecer las alianzas regionales y birregionales, entre la UE, gobiernos de Centro America y actores de la sociedad civil, para atender las causas estructurales de la injusticia y la opresión, inspirados en los Objetivos de Desarrollo del Milenio de la ONU.
Como organización cuáquera, American Friends Service Committee (AFSC) está comprometida a fomentar una paz sostenible y eliminar las causas raíz de la violencia y la opresión, construyendo confianza, cohesión social, e instituciones inclusivas.
En Centro América hemos escuchado y acompañado a las comunidades más impactadas por los sistemas de opresión. Hemos visto algunas inversiones constructivas en programas centrados en las personas. También hemos visto estrategias de cooperación internacional, proyectos y políticas que han tenido un alto impacto negativo en la integridad de las personas, la cohesión comunitaria y su libre determinación, así como en el cambio climático.
En la actualidad, Centro América enfrenta grandes retos relacionados a las causas raíz de las migraciones y los desplazamientos forzados, el respeto por la libre determinación de los Pueblos, así como el deterioro democrático, del estado de derecho, y de los derechos humanos, incluyendo la protección para quienes defienden derechos humanos y protegen a la Madre Tierra.
Hemos visto cómo la diplomacia contribuyó a las estrategias locales y nacionales para el rescate de la democracia. Un ejemplo es la reciente elección en Guatemala, en donde las Autoridades Indígenas y Ancestrales, comunidades y barrios históricamente marginalizados, la observación internacional, el trabajo diplomático, entre otras acciones basadas en derecho internacional, fue la fuerza decisiva para movilizar a un público amplio en favor de la integridad de las elecciones.
Considerando esto, el acuerdo de asociación entre Centroamérica y la UE es una gran oportunidad para promover la articulación multiactor a nivel nacional, regional y entre regiones para el cumplimiento de este acuerdo. Este ofrece posibilidades para la inclusión de las voces de las comunidades históricamente más impactadas.
AFSC presionará para la participación de las poblaciones históricamente impactadas por la injusticia y la opresión. AFSC trabajará para fortalecer las alianzas regionales e internacionales que protejan y expandan el espacio cívico, y aporten a construir movimientos incluyentes que promuevan una construcción de paz con justicia económica, cultural, ambiental y migratoria.